El Gobierno calcula un daño de unos 1.000 millones si se aplican las sanciones de EEUU, que ve "inaceptables"

Si no hay un acuerdo antes y finalmente entran en vigor, las sanciones de Estados Unidos sobre aceites, crítricos, quesos y vinos españoles podrín tener unos daños sobre estos sectores de alrededor de 1.000 millones de euros, según ha apuntado este viernes el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que ha calificado de "inaceptables" las medidas con las que amenaza Washington como consecuencia de un conflicto comercial que afecta a la fabricación de aviones Airbus y que, ha apuntado, no tendría que afectar al sector agroalimentario español.

Según ha explicado en la rueda de prensa al término del Consejo de Ministros, el panel de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que dirime el contencioso entre Estados Unidos y la UE por las ayudas públicas condedidas por los europeos a Airbus ha permitido a Washigton imponer sanciones por un total de 7.500 millones de dolares -6.830 millones de euros-, que la Adminitración de Donald Trump, ha dirigido principalmente contra los cuatro países que conforman el consorcio Airbus, Francia, Alemania, Reino Unido y España. De ellos, Planas, ha afirmado que "la cantidad que podría eventualmente resultar afectada del conjunto de los sectores españoles es en torno a unos 1.000 millones de euros".

En nombre del Gobierno, Planas ha asegurado que las sanciones comerciales de EEUU contra los productos españoles son "inaceptables", aunque todavía no las ha dado por firmes. Según ha explicado, hasta el 14 de octubre hay margen para seguir negociando -la Comisión Europea en nombre de España y del resto de países de la UE- y ha confiado en que se llegue a un acuerdo para que Washington renuncie parcial o totalmente a sus sanciones contra productos europeos.

Hasta entonces, el ministro ha asegurado que el Gobierno seguirá "presionando" para que así sea y ha anunciado una ronda de contactos que empezarán el lunes que viene, cuando se reunirá con todas las comunidades autónomas, "para conformar una posición española común, de tod los sectores". Posteriormente, el martes, Planas se reunirá con los sectores afectados, mientras continuarán también los contactos con la Comisión Europea.

"Nos parece inaceptable que el sector agroalimentario español esté sufriendo las represalias comerciales en relación con este conflicto, que se refiere al sector aeronáutico", ha dicho Planas, que no solo ha criticado las sanciones porque tengan su origen en un sector totalmente distinto al agroalimentario, sino porque todavía había "margen de negociación" antes de que Trump lanzara su amenaza comercial.

La fecha límite es el 14 de octubre, cuando la lista provisional de productos a los que se subirán los aranceles para su exportación a Estados Unidos se hará definitiva. Hasta entonces, Planas ha confiando en las buenas artes de la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, con la que también está en contacto y a la que este viernes ha instado para que "haga cuanto esté en su mano para que esa lista [de productos a los que se subirán los aranceles] no entre en vigor como tal".

Como responsable de la política comercial de los países de la UE, es la Comisión Europea a la que corresponde llevar este conflicto a buen puerto, pero Planas ha elevado el tono en nombre del Gobierno al advertir de que "no deseamos entrar en un conflicto comercial" con Estados Unidos que, no obstante, podría ocurrir si Washington persiste en su actitud.

Planas ha recordado que junto al contencioso de Estados Unidos contra las ayudas públicas de los países europeos a Airbus existe otro pannel paralelo en la OMC, donde la inversa, la UE también impugna las ayudas de Washington a Boeing. En este sentido, ha advetido de que la OMC también falló en el pasado a favor de la UE en este segundo contencios, con la posibilidad de fijar sanciones que los europeos rechazaron imponer. Ahora, ha dicho, podría ser el momento.

"La Comisión Europea tiene en el cajón posibles represalias comerciales de casos anteriores favorables a la UE pero en las cuales, a pesar de la resolución positiva, no se han aplicado retorsiones a Estados Unidos", ha dicho el ministro, que ha reiterado que "estamos al lado de los productores de aceite de oliva, de los aceituneros, de los productores de porcino, de queso y de cítricos, que podrían verse afectados eventualmente por esta medida de retorsión que en absuluto está justificada, máxime cuando nada tiene que ver con el conflicto" comecial sobre Airbus.